El robot cuadrúpedo de Kawasaki que parece sacado de una película de ciencia ficción

Este especial diseño se presenta como una alternativa a las motocicletas de montaña tradicionales y está pensando con fines totalmente recreativos y de exploración. La idea es que los usuarios se suban a esta 'atracción' como si fuera un caballo y la cabalguen. Además, está pensada para que puedan utilizarlo desde conductores experimentados, hasta principiantes, gracias a su estabilidad y maniobrabilidad.

Las cuatro patas, que están equipadas con estructura dividida izquierda-derecha y fabricadas en caucho (material que absorbe las irregularidades de la superficie y es antideslizante) están acopladas de forma que puedan funcionar de forma independiente y cuentan con inteligencia artificial, lo que hace posible diferentes ajustes en tiempo real relacionados con parámetros como la estabilidad o la ruta a seguir y, lo mejor, es que Corleo es capaz de adaptarse a las medidas y peso corporal de cada usuario para mejorar la experiencia de conducción. Por su parte, las patas traseras pueden oscilar hacia arriba y hacia abajo, lo que le permite absorber los impactos durante la marcha y la carrera.

Este revolucionario vehículo preserva el placer de conducir y supervisa continuamente los movimientos del piloto para lograr una tranquilizadora sensación de unidad entre la persona y la máquina. De hecho, el piloto puede controlar la máquina mediante desplazamientos del peso detectados por los estribos y el manillar.

Está equipado con un motor de hidrógeno de 150 cc. El hidrógeno se suministra desde un bidón montado en la parte trasera y la electricidad generada alimenta las unidades motrices instaladas en cada una de las cuatro patas. Por otro lado, viene con una pantalla ubicada en el frontal donde se pueden ver diferentes datos de interés como el nivel de hidrógeno, ruta, velocidad etc. Y por la noche ayuda a una conducción óptima proyectando marcadores sobre la superficie de la carretera para indicar el camino a seguir.

Este prototipo, que todavía es solo un concepto, está previsto dentro de un plan comercial con vista a los próximos 25 años, de ahí que no se hayan facilitado más datos tipo velocidad máxima a alcanzar, autonomía o materiales de fabricación. Su precio tampoco ha sido desvelado, pero dadas sus características barato no será.