Muro de Berlín

Ramón Palomar

La caída

También el Muro de Berlín parecía tan sólido como el de Adriano y en un suspiro se convirtió en escombrera

Jesús García Calero

El 'Good Bye, Lenin', de ahora

Me pregunto cómo nos ven desde el poder. A los poderosos les gusta mucho lucir gafas demoscópicas, tan molonas. Con ellas ven las estadísticas, que nos manejan como números

Sari Rautio

Despertar de la ingenuidad

«Las acciones desestabilizadoras y hostiles de Rusia no solo se limitan a la brutal guerra en Ucrania. Durante años, lleva dirigiendo sus operaciones híbridas no solo a sus vecinos y otros países europeos, sino también en el Sahel»

José Ignacio Salafranca

Europa: tema y variaciones

La UE, a diferencia de otros actores, tiene un proyecto basado en valores. Un proyecto en el que la fuerza de la ley ha sustituido a la ley del más fuerte

Ignacio Ruiz-Quintano

Somos lo que comemos

Políticamente el españolejo lleva casi un siglo comiendo paja, y eso nos da una tribu de adultos que piensan como niños

JUAN LUIS LÓPEZ ARANGUREN

Europa, jardineros en una guerra

El estratega japonés Miyamoto Musashi decía que «es mejor ser guerrero en un jardín que jardinero en una guerra». Tras ser lo primero, el Viejo Continente es hoy lo segundo

Pedro García Cuartango

La Guerra Fría resucita

Volvemos al mundo descrito por Le Carré, al nacimiento de un poder ominoso que amenaza los valores en los que fuimos educados

Maurizio Serra

Elogio del silencio

«Durante siglos, el silencio nos ha acompañado en la contemplación de la naturaleza, en el recogimiento ante las alegrías y las penas, en el disfrute de las representaciones artísticas y musicales»

'Camaradas' nazis en la StasI

Rosalía Sánchez

35 años después de la caída del Muro de Berlín, los archivos de la policía secreta de la Alemania comunista testifican que el régimen reclutó, para «luchar por el socialismo», a agentes que habían trabajado para las SS y la Gestapo

Editorial ABC

Los nuevos muros de un mundo de bloques

No hay más que echar una mirada al mundo para observar los muros que se levantan en el interior de un Occidente que se creía vacunado contra el mal del cainismo