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La huida kamikaze de tres ladrones que acabó con la vida del subinspector Antonio Ramos

Los tres ladrones murieron también en el choque con el vehículo del policía, que salía de trabajar en la Comisaría de Málaga

Mueren un policía y tres ladrones durante una persecución tras un robo en Málaga

Estado de los vehículos tras el accidente y la imagen de Antonio Ramos, el subinspector fallecido ABC
J. J. Madueño

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Tres albaneses cargados de antecedentes por robo fueron los que causaron la muerte del subinspector Antonio Ramos, que deja una viuda y dos hijos, además de una larga hoja de servicio y un recuerdo imborrable en la Comisaría de Málaga. Este miércoles la sensación era de incredulidad y el dolor se apoderó de sus compañeros.

Podría haber sido cualquiera. No fue en una intervención, sino volviendo a casa después de cumplir con el deber. Eso sí, fuentes consultadas por ABC, aseguran que se considera que murió en acto de servicio, ya que ese trayecto se considera parte de la jornada laboral. Aún así, sus compañeros no se creían su mala suerte.

Antonio Ramos salió de trabajar y se fue para Benalmádena, como cada día. En ese municipio a unos 20 kilómetros de la capital es donde tenía su residencia. En el trayecto se cruzó con tres ladrones que huían de la policía en sentido contrario. Los dos coches colisionaron de forma frontal y todos murieron.

Los ladrones, aluniceros y atracadores con investigaciones abiertas por robos en la Costa del Sol, quedaron atrapados en un Volvo. Fueron los efectivos del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga los que intervinieron para rescatar sus cadáveres de los coches. Al subinspector lo sacaron los policías locales que seguían a los atracadores. Los dos coches siniestrados quedaron calcinados.

Durante la madrugada, los tres delincuentes trataron llevarse la caja registradora de una farmacia en Puerto de la Torre. Esta vez trataron de entrar sin llamar la atención. Forzaron el sistema de seguridad para abrir la puerta, acceder y llevarse el dinero que había en la farmacia. Pero no lo consiguieron. Antes de sacar la caja tuvieron que huir.

Tras ellos emprendió un seguimiento la Policía Local de Málaga. Salieron de Puerto de la Torre, cogieron la AP-7 con los indicativos de la policía detrás y llegaron a los accesos de la A-7 en Torremolinos. Ahí se metieron en dirección contraria para tratar de despistar.

Algunas fuentes aseguran que los agentes que les seguían los perdieron hasta que supieron del accidente. Fue en sentido Algeciras, en el kilómetro 226 de esta carretera, donde se produjo el siniestro.

A las 5.10 horas, según el registro de Emergencias 112, llegó el aviso con un choque frontal con varias personas atrapadas en los vehículos. Eran ellos. Los tres albaneses habían impactado con otro vehículo.

La policía sacó al conductor de coche que había frenado en seco la huida. Era el subinspector Antonio Ramos, un ejemplo de policía, que durante una parte de su carrera luchó contra este tipo de bandas en Madrid, que ahora era uno de los guardianes de la noche en Málaga, uno de los jefes de grupo del grupo 'Gotham' de la Policía Nacional.

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